La dimensión mística de la guerra contra Cuba

Por Henrik Hernandez
Desde muchos antes de que nuestra nación naciera por la pujanza de la historia aquel histórico 10 de octubre de 1868, las acciones del depredador del Norte estaban dirigidas a formar o influir en la conciencia social de la población de nuestra Isla (yo diría Archipiélago) con el fin de poner fin a la máxima expresión española”La siempre fiel Isla de Cuba”


Desde entonces vemos que todo el accionar del poderoso vecino se repite una y otra vez contra los cubanos – guerras de todo tipo, bloqueos navales, campañas falaces, etc.
Todos los motivos esgrimidos por EE. UU. Para justificar sus políticas genocidas e imperiales contra nuestra Patria son expresiones del conflicto a nivel espiritual que se libra entre dos grandes egregores; por un lado voluntad cubana de ser libre y en contra del fatalismo geográfico y por otro el imperial con el fin de someternos.


Hoy las redes sociales pone al descubierto las tecnologías psicotrópicas modernas que se emplean para la formación de egregores y como estos interactúan entre sí. La batalla por Cuba se libra no sólo en el mundo físico, sino también a nivel espiritual en las dimensiones astrales y aun muchos superiores a esta. Los campos magnéticos del efir bullen ante tales actividades.


Las expresiones y acciones de las personas que actúan en esa lucha no sólo son las actividades de determinados individuos, sino de los egregores que los dirigen.
Basta de que un determinado grupo de la población forme un ambiente egregoriano para que el resto de esa población actúe en función del egregor, ello explica el porqué en Miami, los cubanos que se instalan en esa ciudad, se ven arrastrado a las líneas energéticas de las campañas anti cubanas, pues son las fuerzas de ese campo Psi, predominante tanto en esa urbe como en el resto del territorio nacional de esa nación vecina.


Si fuéramos hablar en términos espirituales, tendríamos que referirnos a la magia, pero la mayoría de las personas modernas no creen en magia, y por ello es que quienes dirigen los egregores pueden actuar libremente en su formación y fortalecimiento, sin encontrar resistencia tanto a nivel Psi colectivo, como individual.
Todo lo que sucede hoy contra y alrededor de Cuba es el recordatorio de que es una batalla de egregores opuestos no sólo a nivel del mundo material tangible y claro, sino allí en otras dimensiones.


Todas las palabras como Patria, Revolución, Familia, Hijo, Plaza de la Revolución, MTT, Gusano, Contrarrevolucionario, etc. son portadoras en el mundo astral de grandes fuerzas físicas.


El egregor anti cubano cuenta también con esos portadores de fuerzas y es por ello que la batalla debe darse de tal forma que el egregor anti cubano se debilite, pues la conciencia social es un almacén de material explosivo con el cual no se debe jugar con cerillas.


El enemigo bajo el influjo del egregor anti cubanos emplea técnicas psicotrópicas, entre las que podemos nombrar la manipulación de la conciencia, la dirección de grupos y grupúsculos, técnicas de trances psíquicos, programación neolingüística, influencia de campos, formación y modulación de pensamientos, conceptualizad, etc.


Ante un egregror tan poderos sólo podemos anteponer nuestro egregor, cuya fuerza radica y siempre debe radicar en la verdad.
Personalmente al amanecer tomo un baño, después del cual elevo mis oraciones a las fuerzas astrales pidiendo la protección de la nación cubana y leo en voz queda los salmos número 3, 26, 34, siempre mirando hacia la dirección donde nace el sol.


Soy del criterio de que el pueblo cubano, no sólo debe movilizar sus fuerzas físicas e intelectuales contra el egregor enemigo en el nivel material, sino que debe también dedicarse al campo astral y dimensional, con ello quiero decir que todas las fuerzas espirituales y religiosas internas de cada individuo y de las instituciones de tal carácter deben ponerse en función de apoyar la dirección del país y en pedir la protección de nuestra Patria.

 

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